Laura Zamora es la primera enóloga mexicana responsable de una bodega vitivinícola: Bodegas de Santo Tomás. Se formó entre los tanques y las barricas, inició su actividad laboral como asistente de laboratorio y poco a poco aprendió y se enamoró del mundo de la enología, el cual tiene mucho de arte, ciencia, investigación, sentido común y recetas de cocina. La enología es una ciencia que traduce los azúcares y alcoholes en aromas, sabores, sensaciones, colores, pero sobre todo, en vivencias y momentos especiales. En su caminar de más de treinta años por la enología ha cosechado múltiples reconocimientos y elaborado vinos de una gran calidad que han sido premiados tanto en el país como en el extranjero. Su éxito se basa en el profundo conocimiento que tiene del viñedo, del proceso de elaboración del vino, de la fermentación, así como de sus intrincadas y delicadas fases. Laura conoce de cerca el empleo de las levaduras, día a día está al tanto del proceso del intercambio capilar que sucede entre el vino y la barrica, maneja los caldos con una magia que sólo puede nacer del profundo amor que siente por lo que hace y de esa alegría que estalla en su rostro cuando prueba uno de sus vinos, “sus hijos» y sonriendo dice: ¡que rico está!
Como muchos otros enólogos que han pasado, escribe y deja su historia en las vinícolas y los valles. Aporta valor al vino mexicano, al aprovechar todos los recursos que tiene disponibles e invertirlos en hacer vinos con la modernidad que el mercado requiere, pero con el sabor, aromas y texturas que también nos relatan la historia del hombre y de su romance milenario con el vino.
Laura Zamora siente un legítimo orgullo al trabajar en Bodegas de Santo Tomás una empresa orgullosamente mexicana. El vino Único 2004 ganó medalla de plata en el Concurso Mundial de Bruselas 2008. Asimismo, en el Concurso San Francisco International, ganó medalla de plata para el Viento Sirocco 2004, medalla de bronce para el varietal Cabernet Sauvignon 2005 y para el Premium Duetto 2005 medalla de bronce. Estos dos últimos aún sin estar liberados en el mercado. En 2013, el Santo Tomás Gran Reserva 2006 ganó la medalla de oro del Concurso “Catavinum World Wine & Spirits Competition”.
Hay que hablar de los vinos que sueña, diseña e inventa Laura y que son elaborados por todo su equipo, aquellas personas que en el silencio y la intimidad de la sala de añejamiento trasiegan y revisan las barricas o quienes viven jornadas enteras de sol a sol recogiendo racimos, cargando cajas llenas de uva hacia la máquina despalilladora, revisando los caldos en lo alto de un tanque de fermentación o en la calma de un laboratorio… y que con ello, hacen posible y dan forma a los sueños.