La imagen que algunas marcas de ropa proyectan nos hace pensar, por momentos, que la moda es una cuestión que pertenece solo a algunos sectores de la sociedad que pueden tener acceso a ella. Sin embargo, en nuestra vestimenta cotidiana en realidad siempre portamos una moda que refleja la cultura y el momento histórico al que pertenecemos.
Así lo vemos en la exposición “El arte en la indumentaria y la moda en México, 1940-2015”, en donde cuatrocientas obras —entre ellas vestuario y obra plástica, como la de Diego Rivera y Juan Soriano— son la prueba de lo significativa que ha sido la moda en nuestro país.
México, desde tiempos antiguos, ha mostrado en su vestimenta la importancia de hechos sociales, basta recordar la relevancia de los atuendos en bodas o bautizos en comunidades indígenas, donde, indudablemente, los vestidos de novia son impresionantes en técnica y belleza.
Muchas de las tradiciones que se hallan en las telas y textiles indígenas se extrapolaron en los diseños que México tuvo a partir de 1940. Los vestidos de María Félix en películas como Tizoc o Enamorada son el reflejo de culturas diferentes que la sociedad citadina absorbió. Los trajes de tehuana, los huipiles tejidos se volvieron moda en lo cotidiano y hoy estamos permeados de ello.
La exposición conjunta, respetuosamente, la ideología de creadores mexicanos. Por un lado, la de artistas del vestido indígena y por otro, la de diseñadores influenciados por estas corrientes mexicanas. “El arte en la indumentaria y la moda en México…” muestra que la riqueza de nuestro país está en su variedad.
No faltes a esta exposición que estará hasta julio en el Palacio de Cultura Banamex en Madero #17, Centro Histórico, Ciudad de México.