Como saben, tras el sismo del 7 de septiembre del año pasado –que golpeó fuertemente al estado de Chiapas– quisimos ayudar a Don Andrés, un artesano de sombreros al que entrevistamos para el número 106 de la revista y cuya casa en el pueblo de Zinacantán sufrió daños. El proyecto recibió mucha atención, especialmente después del terremoto del 19 de septiembre, y los donativos que se juntaron fueron suficientes para, en conjunto con otras organizaciones y voluntarios (entre ellos los arquitectos Andrés Souto, Luis Carbonel y Rodrigo Pérez Grovas, Mai Martínez de «Corazón Artesanal» y Marua Pinto de «Morenita Mía»), ayudar a otras personas de la comunidad que también salieron afectadas. Estamos muy agradecidos por su apoyo y nos gustaría explicarles cuáles son las estrategias por medio de las que se ha buscado ayudar a los habitantes de Zinacantán.
Acercamiento a la comunidad
Se llevaron a cabo actividades para acercarnos a la realidad y necesidades de la comunidad, así como para generar un vínculo de confianza que permitiera a ambas parte intercambiar información enriquecedora.
Durante la primera visita se organizó un taller de primer acercamiento en el que se hizo una presentación de introducción, sensibilización sobre los hechos y desastres del sismo, y una capacitación sobre temas de construcción.
El taller buscaba reconocer el valor de las técnicas y materiales de construcción tradicionales y cómo pueden combinarse con técnicas y materiales contemporáneos para encontrar un balance entre los dos que sea eficiente y seguro. También se hizo hincapié en la importancia de llevar a cabo prácticas adecuadas de construcción.
También se organizaron entrevistas con cada familia, cuyos miembros compartieron sus experiencias durante y después del sismo, cómo les afectó y qué pérdidas sufrieron. Nos hablaron de sus estructuras y dinámicas familiares, y de sus vidas cotidianas. Las entrevistas funcionaron como un espacio para que los miembros de la comunidad expresaran sus posturas respecto a la toma de decisiones necesarias para recuperar y reconstruir sus casas.
Recorridos de visita
Se hicieron múltiples recorridos del pueblo en los que se visitaron las zonas de desastre y las casas afectadas. Al entrar a las casas, pudimos ver de cerca la estructura familiar de los habitantes, conocimos sus viviendas y la forma en que viven. También nos permitió conocer a más familias que necesitaban ayuda y a las que se les ha apoyado por medio de despensas y consejo.
Seguimiento
A lo largo de todo este proceso, nos hemos reunido con habitantes de Zinacantán para dar sesiones de terapia comunitaria. Nos presentamos como un foro en el que pueden platicar sobre lo que sucedió los días de sismo, cómo se han sentido desde entonces, qué les preocupa y qué mejoras han visto aquellos que prefirieron reconstruir por su cuenta.
Son tres los casos en los que se está ayudando a reconstruir estructuras dañadas, estos fueron los edificios afectados:
Don Andrés
La historia de Don Andrés fue el detonador que atrajo la atención hacia los daños sufridos en la comunidad de Zinacantán y los problemas a los que había que hacer frente.
Uno de los muros de adobe de la cocina de su casa sufrió un desfase, por lo que el habitáculo quedó comprometido estructuralmente. Además, la cimentación de la casa de su hijo, quien acababa de iniciar obras de ampliación, tuvo afectaciones menores, así como algunos muros fueron desplantados.
Apoyo: los afectados han formado parte de las actividades enlistadas anteriormente y se les hará un donativo en especie que incluirá herramientas y equipos de construcción
Mariano y Pascuala
Su casa quedó muy afectada y, dado que era en la que más personas vivían, se convirtió en el caso prioritario.
La familia ha participado en las actividades generales y también hemos organizado otras especialmente enfocadas en ellos y su situación. Realizamos un taller participativo en el que los integrantes de la familia y los miembros del equipo definieron y diseñaron en conjunto el orden y programa arquitectónico de su casa nueva. Elaboramos un maqueta interactiva en la que pudieron hacer los acomodos que más se adaptaran a sus necesidades. Los arquitectos fueron guías que apoyaron en temas técnicos y dieron consejos para mejorar la distribución del espacio de manera que optimizara el diseño.
En oficina se diseñó un proyecto arquitectónico para llevar a cabo la ejecución, gestión y administración de la reconstrucción de la casa. Se planeó el proceso de la obra en colaboración con el arquitecto Perezgrovas y desde su arranque el 27 de noviembre del año pasado, esta se ha desarrollado bien.
Buscamos que esta primera casa se convierta en un punto de referencia para un diseño que contempla las necesidades requeridas por la familia, así como que sirva para ejemplificar de la forma en que podemos aprovechar técnicas tradicionales de construcción y combinarlas con sus contrapartes contemporáneas.
Se firmó un contrato de coparticipación con la familia en el que ellos se comprometieron a formar parte de los trabajos y actividades para ayudar en cualquier cosa que aporte a los trabajadores, a la familia y a la obra.
Doña María
La casa de adobe de Doña María –una señora que vive sola y tiene ciertas limitantes provocadas por su edad avanzada– quedó afectada con el sismo. El techo de madera y teja sufrió daños y buena parte del tejado se cayó, lo que provocó que las vigas de madera, que estaban en muy mal estado, quedaran expuestas a la intemperie.
Doña María ha participado en las actividades generales y además le entregamos una lona para que cubriera completamente el habitáculo. Con ayuda de sus familiares y amigos, desmontaron todas las tejas, separando las que están en buen estado de las que no, y se colocó la lona, que protege todo el techo.
Fotografías por Camila Cossío y por miembros del equipo de arquitectos, incluido Rodrigo Pérez Grovas, quien lleva la obra.
Muchas gracias por su apoyo, el pueblo de Zinacantán merece nuestra atención y ayuda. Esperamos que este pequeño resumen les muestre que sus donativos se están usando bien y que el trabajo que está haciendo en el pueblo está teniendo un impacto en las vidas de la comunidad. ¡Gracias!