Uno de los frutos más cultivados a nivel mundial, al que se le atribuyen propiedades…
Agua de Chile, la primera marca mexicana para bebés y niños con bordados hechos 100 por ciento a mano por mujeres artesanas de Atla Pahuatlan, Puebla.
Sombrero de Charro Bordado con pita. Zaragoza, Puebla. Pieza ganadora del XXXI Concurso Nacional del Gran…
Mosaico del Callejón de los Sapos. Puebla de los Ángeles, Puebla.
Kuchúuni, xāntsjen’, ri’ndu, nch’on… kēénni téjuni nátōón chāsinndājni sinch’eni xra’, xr’éeni yā tajon vāsayéeni. Las…
Calavera con traje de jaguar. Barro policromado. Izúcar de Matamoros, Puebla.
Para recibir a Agustín de Iturbide en la ciudad de Puebla, el 28 de agosto de 1821, las monjas del convento de Santa Mónica crearon un platillo que simbolizaba la bandera nacional: el verde, esperanza, con el chile poblano; el blanco, religión, con la salsa de nuez de castilla; y el rojo, unión, con la granada.
Los orígenes de este santuario del saber, ubicado en el corazón de la colonial ciudad de Puebla, se remontan a los siglos XVII y XVIII cuando el obispo Juan de Palafox y Mendoza tomó la revolucionaria y benevolente decisión de crear una biblioteca pública –la primera en México y en el continente americano– para que los seminaristas de los colegios de San Pedro, San Pablo y San Juan Evangelista pudieran estudiar y tener acceso libre a libros y documentos.