COLEGIO DE SAN ILDEFONSO EXPONE “EL GALEÓN DE ACAPULCO-MANILA. SOMOS PACÍFICO”, DOS SIGLOS DE RELACIONES ENTRE MÉXICO Y FILIPINAS

by Mexicanisimo
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SC/CPDC/521-25

  • Es una selección de más de 300 piezas como objetos de navegación, mapas, cerámicas, textiles y obras de arte provenientes de acervos nacionales e internacionales que permiten dimensionar la relación política, económica y social entre Acapulco y Manila, construida por más de 250 años gracias a la ruta marítima que conectó ambos territorios entre 1565 y 1815
  • La exposición se encuentra dividida en siete núcleos temáticos ordenados cronológicamente: Somos Pacífico; La construcción del Pacífico mexicano; La primera ruta comercial; Misión Hasekura; El fin de los galeones; Tropical y El Pacífico hoy. Podrá visitarse a partir del 4 de diciembre 2025 hasta el 31 de mayo 2026, de martes a domingo, de 11 a 17:30 horas

La navegación que por más de dos siglos y medio, entre 1565 a 1815, unió a Acapulco y Manila no solo fue una ruta comercial, fue un vínculo que tejió relaciones económicas, sociales, políticas y espirituales, forjando un legado entre México y Filipinas. El Colegio de San Ildefonso ofrece una mirada a esa red de intercambios que transformaron la vida en ambas orillas del Pacífico en la exposición El Galeón de Acapulco-Manila. Somos Pacífico. El mundo que emergió del trópico, con más de 300 piezas como cerámicas, mapas, textiles, objetos de navegación y obras de arte, que estará abierta al público a partir del 4 de diciembre de 2025 hasta el 31 de mayo 2026.

En este mismo espíritu de intercambio, la exhibición se presenta en el marco de la conmemoración de los 50 años de la cooperación bilateral, académica y cultural tras el establecimiento de relaciones diplomáticas entre México y Singapur. En este sentido, ambos países han construido nuevas alianzas que fortalecen la investigación, la creación artística y la circulación del conocimiento, recordando que el Pacífico continúa siendo un territorio vivo de colaboración y entendimiento.

«Somos Pacífico. Nuestra cultura, nuestra civilización, nuestra diversidad, es inentendible, indescifrable, si no nos damos cuenta que gran parte de nuestro mundo, de nuestra cultura, mira al Pacífico. Desde que somos niños, nuestro mapa mental, el que nos enseñan desde la primaria, tiene en su centro al Atlántico, con América a la izquierda y Europa, a la derecha. Esta idea que nos parece el orden natural, una interpretación del mundo, y aquí queremos interpretar el mundo desde otra perspectiva, entendernos como parte de un mundo que tiene el Pacífico en el centro con el que nuestras civilizaciones llevan un diálogo antiquísimo, desde el proceso de poblamiento de América, nuestra relación con Asia es fundamental», dijo el coordinador ejecutivo del Colegio de San Ildefonso, Eduardo Vázquez, durante la ceremonia.

La muestra revela la forma en que la vida cotidiana, la devoción, la diplomacia y el comercio se entrelazaron durante siglos de navegación transpacífica y que dejaron huella en los mercados, las lenguas, las prácticas cotidianas y las expresiones artísticas. México se volvió un punto de articulación entre continentes y, de ese tránsito constante, surgió una memoria compartida que aún hoy perdura en ambos territorios.

Entre las piezas que se pueden apreciar se encuentran cofres tallados en marfil y nácar, porcelanas Ming, lacas filipinas, textiles novohispanos y talaveras poblanas dialogan con un monumental biombo de galeones, un arcón con incrustaciones orientales e instrumentos de navegación del siglo XVI al XIX que guiaba la ruta entre ambos puntos. Cada pieza conserva la huella del asombro y testimonia un viaje que transformó la vida, el arte y la memoria, recordando que el mar une.

Originalmente, la exposición fue concebida por Clement Onn para el Asian Civilisations Museum (ACM), y en esta edición se enriquece con el trabajo curatorial de Iván Valdéz-Bubnov (UNAM), Roberto Junco (INAH), Shabbir Hussain Mustafa, Teo Hui Min, Cheng Jia Yun y Seline Illana Teo (National Gallery Singapur), en colaboración con el Colegio de San Ildefonso.

Articulada de manera cronológica y dividida en siete núcleos temáticos, el recorrido de la exposición inicia con Somos Pacífico mostrando las raíces más profundas antes de que los galeones unieran las costas de Acapulco y Manila, donde ya existían pueblos que habitaban y navegaban estos territorios. Vestigios arqueológicos, ilustraciones y objetos que revelan las civilizaciones que dieron forma a esos mundos, sus formas de concebir la naturaleza desde el agua y la tierra y a través de los cuales se permite comprender la manera en que cambiaron su entorno y que, tras la conquista española, sus horizontes se entrelazaron con la llegada de la comercialización.

El segundo núcleo es La construcción del Pacífico mexicano, la cual muestra cómo la ruta marítima no solo transportó mercancías sino personas, saberes y tradiciones. En los astilleros de la Nueva España se construyeron las grandes naves que cruzaron el océano, impulsadas por tripulaciones diversas que unieron continentes y lenguas. Se revela la forma en que el mestizaje cultural y biológico transformó los paisajes, la gastronomía y las expresiones artísticas dando forma a un legado entre México y Filipinas.

Por su parte, La primera ruta comercial presenta a México como un país marítimo, un puente entre dos océanos y el nexo que hizo posible la primera economía global. Sus fortificaciones portuarias, tradiciones marineras, cultura cosmopolita y su población plural dan testimonio de esa vocación. Los galeones que unían Acapulco y Manila transportaban plata mexicana hasta Filipinas, donde comerciantes de China, India, Malaca, Sumatra, Japón, Siam, Camboya y Java la recibían para intercambiarla por seda, especias, muebles preciosos, marfiles tallados, obras de arte y manufacturas de uso cotidiano.

Continuando con la muestra, en Misión Hasekura se relata la travesía del samurái Hasekura Tsunenaga, quien, entre 1613 y 1620, encabezó la Embajada Keicho, enviada por el daimyo Date Masamune desde Sendai hacia la Nueva España. Su viaje buscó abrir rutas fructíferas entre Japón y Acapulco y así, compartir conocimientos sobre la extracción de plata. A bordo del San Juan Bautista, la misión llegó a Acapulco y recorrió Cuernavaca, la Ciudad de México y Puebla antes de continuar hacia Europa. Aunque sus objetivos diplomáticos no se concretaron, su paso dejó huella como el primer intento por conectar Japón y la Nueva España, símbolo temprano del diálogo transpacífico que uniría a ambos mundos.

Con El fin de los galeones, la exhibición narra la disolución de una era. A finales del siglo XVIII, los nuevos viajes de la Real Armada española y la guerra de Independencia de México debilitaron la ruta náutica. En 1815, el Galeón Magallanes regresó a Manila sin su cargamento de plata, marcando el fin simbólico del intercambio entre Acapulco y Filipinas.

Con la Independencia, México perdió su conexión marítima con Asia, que solo se restablecería décadas después al firmarse el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación con Japón en 1888.

El núcleo Tropical explora la creación artística entre América Latina y el sudeste asiático a partir del arte moderno del siglo XX. Inspirado en la exhibición “Tropical: Historias de Asia del Este y América Latina” de la Galería Nacional de Singapur, muestra la manera en que diversos artistas evolucionaron su herencia colonial en un lenguaje de libertad. Desde Diego Rivera y Miguel Covarrubias, hasta creadores del sudeste asiático como Victorio Edades o S. Sudjojono, lo tropical se revela como una actitud creativa y de resistencia, donde la estética se convierte en un punto de encuentro y solidaridad.

Finalmente, El Pacífico hoy ofrece una mirada contemporánea a las relaciones entre México y Asia. A través de obras, videos y testimonios, este espacio aborda cómo las memorias históricas del Galeón de Manila continúan resonando en la creación artística actual. Las identidades transpacíficas y los movimientos migratorios revelan que el océano sigue siendo un puente vivo.

El proyecto es resultado de una amplia colaboración internacional e interinstitucional que reúne valiosos acervos, conocimientos y esfuerzos curatoriales. Surge del trabajo conjunto del Asian Civilisations Museum de Singapur (ACM), el Programa de Estudios Filipinas–México del Instituto de Investigaciones Históricas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el Colegio de San Ildefonso, con la colaboración de la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Embajada de México en Singapur.

Participan también instituciones y museos de Singapur como la National Gallery Singapore, el National Museum of Singapore y el Singapore Art Museum y el Museo de Arte de Singapur; así como, de Filipinas, el Museo Ayala y la Intramuros Administration Collection. Por parte de México, se suman el Museo José Luis Bello y González, el Museo Casa del Alfeñique y el Museo Internacional del Barroco, en Puebla; el Museo Franz Mayer, el Museo del Banco de México, el Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, Casa Luis Barragán y el Archivo General de la Nación.

Del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) participan el Museo Nacional de Antropología, el Museo Nacional de Historia, el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, el Museo Nacional de las Intervenciones, el Museo Maya de Cancún, la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia y la Subdirección de Arqueología Subacuática. Por parte del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) colaboran el Museo Nacional de Arte y el Museo Nacional de la Estampa.

La muestra se enriquece también con obras provenientes de colecciones particulares, cuya generosidad permite presentar piezas que, en muchos casos, se exhiben por primera vez ante el público.

En la presentación y recorrido de la exposición participaron el Embajador de México en Singapur, Agustín García-López Loaeza; el director del Museo de las Civilizaciones Asiáticas de Singapur, Clement Onn; Eugene Tan, CEO de la Galería Nacional de Singapur; Iván Valdez-Bubnov, coordinador del Programa Filipinas-México; Roberto Junco, subdirector de Arqueología Subacuática del INAH y Juan Manuel Garibay López, coordinador Nacional de Museos y Exposiciones del INAH, así como las curadoras de Singapur.

El Galeón de Acapulco–Manila. Somos Pacífico, abierta del 4 de diciembre de 2025 al 31 de mayo de 2026, invita a redescubrir la historia entre México y Filipinas a través del arte, la fe y la memoria.Se puede visitar en el Colegio de San Ildefonso, en Justo Sierra 16, Centro Histórico, con un horario de martes a domingo, de 11 a 17:30 horas.

La admisión general a las exposiciones temporales es de $50.00; estudiantes y maestros con credencial vigente $25.00. La entrada es libre para niños menores de 12 años, adultos mayores con credencial INAPAM, Programa de Membresías de San Ildefonso, Prepa Sí (CDMX) y En contacto contigo de la UNAM. Domingo entrada libre.

Para mayor información se puede consultar la página: http://www.sanildefonso.org.mx/visitante/. Y sus redes sociales X: @SanIldefonsoMx | Facebook: Colegio de San Ildefonso | Instagram: sanildefonsomx | Tik Tok: @SanIldefonsoMX | YouTube: Colegio de San Ildefonso Threads: @sanildefonsomx

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