Ante la efervescencia y el bullicio que a diario vivimos millones de capitalinos, en esta época convulsiva y fugaz, nos resulta difícil hacer un alto y voltear a nuestro alrededor para localizar esos lugares que bien nos pueden ayudar a encontrar la calma y ecuanimidad que tanta falta nos hace y, sobre todo, a incrementar nuestro acervo informativo vinculado con las raíces de nuestra cultura y riquezas arqueológicas ubicadas en algunos destinos del país, en especial, en aquellos cercanos a la Ciudad de México.