La variedad gastronómica con la que cuenta el territorio mexicano es sin duda una de las grandes riquezas que las demás regiones aplauden y degustan al llegar a tierras mexicanas. Pan de cazón, panuchos y demás preparaciones son reconocidos en Campeche, estado que ostenta deliciosos y únicos platillos provenientes de la cultura maya, haciendo gala de sus ingredientes a propios y extraños.
La gastronomía prehispánica contaba primordialmente con ingredientes como el venado, jabalí, iguana y tortuga, además de otros componentes a modo de acompañar el platillo como por ejemplo: el maíz, el cacao y la miel. Posteriormente con la llegada de los españoles e invasiones de piratas, se sumaría el cerdo y así se crearían nuevas formas de preparación.
Un plato emblemático de Campeche es El Pan de Cazón, el cual es reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y solicitado en todos los restaurantes por sabor y aroma que se caracterizan de todos los demás, siendo su ingrediente principal un escualo perteneciente a la familia de los tiburones, sólo que más pequeño y que se localiza en el Golfo de México.
Su preparación consiste en tres tortillas con frijoles refritos sobre los que se coloca el cazón guisado y desmenuzado, bañado en una salsa muy especial, con manteca de cerdo, cebolla y el aromático epazote. Se sirve adornado con rebanadas de aguacate y chile habanero.
Otra preparación que se disfruta singularmente los sábados en la tarde noche en los hogares de Campeche es el Chocolomo, que significa “caliente y lomo”. Tiene su origen en 1543, cuando los mayas empezaron a sacrificar reses dejando de lado al venado. El plato lo consumen ya sea para fiestas o para curar la resaca.
La elaboración consta de un puchero de lomo de res y riñones, todo condimentado con jitomate, ajo, pimienta, orégano, cebolla, cilantro, comino, hierbabuena, clavo, jugo de naranja y sal. Cuando finalmente está cocido se agregan rebanadas de lima y lechuga.
Campeche no solamente dispone de ua gran variedad de platillos gourmet, también presume de un sinfín de postres y dulces típicos que deleitan el más fino paladar del mundo. Nance, frailes, pepitorias y negritos son sólo algunos aperitivos que se pueden localizar en el estado.
El pan de Frailes lleva su nombre gracias al estilo de cabello corto mostrando una parte pelona de la cabeza que anteriormente se usaban en las órdenes religiosas, por tal motivo, cuentan con un aspecto redondo y coronado con una fina capa de merengue. Su sabor es por la combinación de tostadas de harina, rellenas de coco junto con merengue espolvoreado con azúcar color rosa.
La capital de Campeche cuenta con autenticos pregoneros al anunciar por sus calles la gran variedad de productos con los que cuentan: “Pan marchante, pan caliente, saramucha, pan batido, hojaldras de a tres por veinte…” se anuncian brindando al turista no solamente un aperitivo regional, sino también la calidez del pueblo campechano.
El sabor de Campeche cuenta con una variada influencia de la cultura maya que se complementó con la llegada de los españoles; animales marítimos como el pez ángel, la trucha, la mantarraya, el tiburón y el pámpano, por mencionar algunos, abundan en la tierra amurallada, y de igual manera la almendra, vainilla y guayaba que son ingredientes extras que se utilizan en la elaboración de sorprendentes platillos regionales.
En portada Pan de Cazón