Inolvidable actriz juvenil de la cinematografía nacional, de la llamada época de oro del cine mexicano. Nace en la Ciudad de México en 1938. Recién terminados sus estudios primarios, su inquietud artística la lleva a realizar estudios de teatro en Bellas Artes.
Recién graduada, y admirada por su bellísimo y expresivo rostro, a los quince años, es contratada en papeles secundarios en un par películas. El director Ismael Rodríguez la incluye en la cinta Maldita Ciudad, 1954, en la cual es nominada al Ariel por su bien lograda actuación.
Desde entonces su carrera cinematográfica se manifiesta de forma vertiginosa con cintas como: Los tres Villalobos, 1955; ¡Vaya tipos!, 1955; Bodas de oro, 1956; Con quién andan nuestras hijas, 1956; El chismoso de la ventana, 1956.
Cinco años de intensa e ininterrumpida actuación dan cuenta de veintitantas cintas de diversos géneros: drama, ranchero, acción. Sin embargo, al término de la filmación de Quinceañera, 1960, su película más celebrada, decide retirarse al casarse con el empresario regiomontano José María Fontanet.
Ahora vale mucho recordar a la inolvidable Martha Mijares, viendo alguna de sus películas. Quizá El chismoso de la ventana, con Clavillazo, parodia de la Ventana indiscreta, 1954, de Alfred Hitchcock; y en especial, disfrutar a carcajadas de la escena del baile de tango entre ella y el cómico poblano.