Taste Atlas es un atlas gastronómico creado por el croata Matija Babic cuando reparó en la insuficiencia de la información que existe respecto a la comida típica de muchos lugares del mundo.
Este mapa, en el que se muestra de forma muy gráfica y clara cuáles son los platillos y productos más típicos de todo el mundo, ha tenido un gran éxito debido a su utilidad y a la gran cantidad de platillos que ha dado a conocer a muchos turistas y viajeros.
Taste Atlas decidió convocar una votación pública para determinar cuál es el mejor y más delicioso platillo del mundo según la opinión popular. Para ello, se hizo un listado de los 100 platillos más populares en todo el mundo y, sobre ese listados, se pudo votar el mejor platillo.
La competencia estuvo reñida, hay que decirlo. Pero finalmente no gañó el ratatouille o el pato a la naranja de la alta cocina francesa; tampoco ganó el espagueti a la boloñesa o la internacional pizza italiana. Sí, señores, el taco al pastor, mexicanísimo y chilango, se alzó con la corona del más delicioso platillo del mundo.
Y es que nadie que viva o que visite la Ciudad de México se puede resistir a un buen taco al pastor. Para que deleites tu paladar y compruebes que el resultado de este concurso no podría haber sido otro, aquí te dejamos algunas opciones de taquerías especializadas en tacos al pastor, en la Ciudad de México, de las que más recomiendan los chilangos expertos en el noble arte de comer un buen taco al pastor.
El Taquito de Sotelo: hacia el norte de la ciudad existe un rinconcito gastronómico que deleita los paladares con hamburguesas, tortas y… ¡tacos! Así es, en este «mercado» callejero, el puesto de El Taquito de Sotelo se lleva las palmas y a los clientes. Ricos, bien surtidos y con una salsa deliciosa, no hay quien se resista a estos pastores.
El Vilsito: la Narvarte es una cajita de sorpresas que esconde una de las taquerías más pintorescas de la ciudad. Los fines de semana verás multitudes aglutinadas en torno a un par de enormes trompos, hermanando a los lugareños con turistas y visitantes de otras colonias. Esta refaccionaria de día, convertida en taquería de noche, no tiene parangón en el adobo de su carne y la rapidez de su servicio.
El Huequito: el famoso de los famosos. Desde que abrió sus puertas en 1959, en aquel primer local de un metro cuadrado (sí, un metro cuadrado que era literalmente un huequito en la pared) esta taquería ha estado deleitando los paladares más conocedores de los chilangos. Con varias sucirsales ya repartidas por toda la ciudad, el huequito original sigue siendo lugar de visita obligada para el turista bien informado.
¿Y tú? Cuéntanos, ¿dónde comes tus tacos al pastor?