Por Andrés Bayona
El fantástico Sr. Zorro, dirigida por Wes Anderson, logró catapultarse como uno de los largometrajes animados más divertidos y aclamados de los últimos años, capaz de impresionar y de atraer a múltiples espectadores. Su última película, Isla de perros (Isle of Dogs, 2018), no es la excepción. La historia se desarrolla en Japón, en un futuro no muy lejano en el que los jóvenes quieren desmantelar la corrupción política de ese país. Sin embargo, la narrativa se concentra en los perros, quienes han sido exiliados de la ciudad de Megasaki debido a una epidemia de gripe canina y de la “fiebre del hocico”. Su nuevo hogar: una isla desalojada, inhabitable y llena de desechos.
El grupo de cuadrúpedos, liderado por el leal Rex (Edward Norton), el chismoso Duke (Jeff Goldblum), la mascota deportiva Boss (Bill Murray), el irreverente actor King (Bob Balaban) y el callejero Chief (Bryan Cranston), quien, a pesar de ser el problemático del grupo, termina convirtiéndose en el alma y corazón de esta película.
Obviamente, la mayoría del elenco no habla japonés. Por ello, de una manera creativa, Anderson decide que sus perros hablen en inglés mientras que el resto de los personajes hablen en su lengua nativa. Para evitar subtítulos, el director recurre a presentadores de televisión o a locutores de radio que sirvan como traductores, uno de ellos interpretado por la magnífica Frances McDormand.
La historia da un giro cuando Atari, un niño japonés de 12 años, aterriza en su pequeña aeronave con el propósito de encontrar a su perro, Spots. Isla de perros, además de ser una encantadora historia acerca del amor de un niño por su mascota, también es una película política, con un fuerte mensaje medioambiental, de los derechos de los animales y un gran tributo al cine japonés.
Es claro que Anderson y su equipo no hicieron esta película para el público infantil. Aunque la trama no es complicada, aborda temas maduros, está cargada de momentos emotivos y se concentra en la lucha por salvar a los animales antes de que “los villanos” los erradiquen, a través de la aventura que viven Atari y los perros. En un interesante giro que da la historia, que involucra el debate sobre el control de armas, se incorpora un grupo de adolescentes quienes terminan siendo la voz de la razón, uniéndose a Atari para derrocar al poder político.
Cada plano, movimiento, color y gráfica en Isla de perros está fríamente calculado y resulta en un armonioso mundo que es imposible de ignorar, además de la increíble música compuesta por Alexandre Desplat (La forma del agua). Isla de perros está cargada de detalles visuales, referencias cinematográficas e ideologías políticas, convirtiéndola en la mejor cinta de Wes Anderson a la fecha.
Título original: Isle of Dogs.
Duración: 101 minutos.
Dirección: Wes Anderson.
Guión: Roman Coppola, Jason Schwartzman, Kunichi Nomura y Wes Anderson.
Música: Alexandre Desplat.
Fotografía: Bobby Bukowski.
Reparto: Bryan Cranston, Koyu Rankin, Edward Norton, Scarlett Johansson, Bob Balaban, Frances McDormand.