Ya que nos habíamos quedado medio afónicos por la emoción de ver a Guillermo del Toro subir al escenario a recibir las estatuillas del Óscar a la Mejor película y Mejor director por su trabajo en La forma del agua, en Mexicanísimo pasamos a preguntarnos cuáles eran nuestras películas favoritas del paisano. Es por eso que elaboramos esta lista, en la que ordenamos los 10 largometrajes que ha hecho nuestro director tapatío favorito, según cuáles nos gustan más.
10. Mimic
El segundo largometraje de Del Toro es también el que más dolores de cabeza le trajo en fase de producción. Lo hizo en colaboración con los hermanos Weinstein, una experiencia que cuenta entre las peores de su vida, pues no tuvo control sobre el corte final y quedó insatisfecho con la el producto terminado. Sin embargo, es también una película con la que demostró que podía manejar un presupuesto hollywoodense e incluir su visión particular sin importar el género al que se adentrara, en este caso una película sobre cucarachas gigantes que toman la forma y atacan a los humanos, todas elaboradas con efectos prácticos.
9. Blade II
Del Toro ha dicho en entrevistas que cuando conoció a Wesley Snipes, protagonista de la saga de Blade, este le dijo que a lo largo de toda la grabación quería terminar de grabar temprano para irse a su casa. Del Toro le prometió que esto se podría lograr, siempre y cuando él se encargara del personaje (un vampiro caza vampiros), pues a él lo únicos que le interesaba eran lo vampiros. La película es una típica cinta de acción, pero se destaca por el diseño de los villanos, vampiros con unas mandíbulas estilo Depredador.
Titanes del Pacífico
Nos encanta esta película, desafortunadamente, dada la calidad de la filmografía de Del Toro, no puede estar más arriba en la lista. Titanes del Pacífico es uno de los blockbusters más divertidos que se han hecho en años recientes: trata sobre robots gigantes luchando contra monstruos gigantes y es una obra maestra de coreografías de pelea, con momentos épicos y un mensaje sobre la importancia de la confianza en el otro y la colaboración entre individuos para salir adelante. Queda poco para que salga la secuela, que desafortunadamente no fue dirigida por Del Toro, aunque sí fungió como productor.
7. Hellboy
Con la gran cantidad de películas de superhéroes que se han estrenado últimamente, es fácil sentir que el género ya está muy desgastado. Sin embargo, cuando Hellboy fue estrenada en 2004, marcó un punto importante en el desarrollo de este tipo de cine, con unos efectos visuales extraordinarios, personajes interesantes y un guión complejo que le trajo buenas críticas. Es un deleite visual, una película en la que Del Toro pudo sacar a relucir su talento como diseñador de criaturas y de dotarles de profundidad y mucho carisma, a pesar de su físico extraño.
Hellboy II: el ejército dorado
Guillermo mantuvo el nivel que alcanzó con la primera entrega de la saga Hellboy en su secuela, que desafortunadamente resultó la última de la serie, pues en 2019 se estrenará una nueva película del personaje, sin la participación del tapatío. A pesar de esto, sigue siendo considerada una de las mejores películas de superhéroes que se han hecho. Y es un título bien merecido, pues es una verdadera gozada, divertida, visualmente muy bella y con magníficas actuaciones por parte de Ron Perlman y Doug Jones (dos de los actores musa de Del Toro, que han aparecido en la mayoría de sus largometrajes).
Cronos
Desde su ópera prima, Guillermo del Toro dejó claros cuáles eran sus intereses como cineasta. Cronos es una historia de vampiros, pero como ninguna otra. En lugar de presentar a estas criaturas sobrenaturales como monstruos chupasangre, los muestra como seres trágicos, que se consumen a sí mismos como víctimas de una adicción. El personaje principal es Jesús Gris, un anticuario de edad avanzada y abuelo cariñoso. Un día se topa con un artefacto dorado que le otorga vida eterna, pero que le trae una sed insaciable por la sangre, algo a lo que en un principio se resiste, pero que termina destruyéndolo. La película fue un éxito en su momento y puso a Guillermo del Toro a en el mapa de los nuevos directores jóvenes de su generación, a partir de entonces, su prestigio no ha dejado de crecer.
4. La cumbre escarlata
La penúltima película de Del Toro es también su más incomprendida, pues fue víctima de una campaña de mercadotecnia que hizo pensar al público que era una cinta de terror, cuando en realidad se trataba de un romance gótico, por lo que muchos quedaron decepcionados. Cuando te acercas a ella sin esperar sustos y monstruos, es mucho más fácil entender sus virtudes. Del Toro construye espacios suntuosos para contar una historia de amor imposible y los monstruos que esta engendra, y como en muchas de sus películas, no es a los fantasmas a los que hay que temer, sino a los seres humanos.
3. El espinazo del diablo
Es difícil ordenar las últimas tres películas de Guillermo del Toro, pues todas nos parecen maravillosas. Sin embargo, muy a nuestro pesar, decidimos poner a El espinazo del diablo en tercer lugar. Si bien Cronos ha sido uno de las óperas primas más celebradas de los últimos años, fue hasta esta película con que Del Toro fue verdaderamente catapultado a la fama internacional, como un cineasta propositivo y con una visión única. Situada en los años finales de la Guerra civil española, la película se desarrolla en un orfanato, con los niños como protagonistas. Es una historia de fantasmas que habla sobre las huellas dejadas por la violencia y la resistencia hacia los regímenes autoritarios, de las temáticas favoritas de Del Toro.
2. La forma del agua
Llegamos a la obra más reciente de Guillermo, la que le trajo los Óscares al Mejor director y a la Mejor película, y una de sus proyectos más personales. Con ella, el tapatío quiso hablar sobre el amor hacia el otro, hacia el diferente. Lo hizo por medio de una fábula que cuenta la historia de amor entre un monstruo acuático y una mujer muda que limpia la agencia gubernamental donde lo tienen encerrado durante la Guerra Fría. Los personajes principales son todos miembros de la otredad: una mujer con discapacidad, un hombre homosexual y una mujer negra, que se unen para liberar a una criatura que corre el riesgo de ser destruida por la mano de científicos y burócratas, los verdaderos monstruos de la historia, y con la que comparten un sentimiento de soledad. Es una película conmovedora, con una fotografía, banda sonora y actuaciones excelentes. Merecida ganadora de las decenas de premios que ha recibido desde su estreno el año pasado.
1. El laberinto del fauno
Sí, ponemos a El laberinto del fauno hasta arriba en nuestra lista, pero está apenas un pelo por encima de las dos anteriores. Dicho esto, no podía ser otra, pues es en ella donde Guillermo del Toro lleva al punto más alto sus capacidades como narrador y constructor de espacios, atmósferas y personajes fantásticos. La película narra la historia de Ofelia, una niña que lidia con los horrores de la Guerra civil española refugiándose en cuentos de hadas. Ofelia se encuentra con un fauno que le anuncia que debe pasar tres pruebas para que pueda entrar a un reino fantástico del cual es la princesa. Su aventura la lleva a enfrentarse con monstruos terribles, pero ninguno peor que el capitán Vidal, su padrastro, un militar franquista despiadado y cruel que mata sin reparo. La película le trajo las nominaciones al Mejor guión y a la Mejor película extranjera a Del Toro, y se ha convertido en un clásico moderno del cine.
Foto principal: «Guillermo del Toro» por Gage Skidmore, CC BY-SA 2.0.