A pesar de la atención mediática y los esfuerzos de conservación que se han hecho para tratar de evitar la extinción de la vaquita marina, un pequeño mamífero que habita en la zona norte del Golfo de California, el día de hoy se calcula que solo quedan alrededor de 30 ejemplares con vida. Es por ello que el artista mexicano Patricio Robles Gil tuvo la iniciativa de organizar una procesión, que funcionará como una forma de ritual para honrar a esta especie y hacer un llamado a la sociedad mexicana a involucrarse en las labores de conservación de las especies de plantas y animales que hay en nuestro país.
La Procesión en Honor a la Vaquita Marina partirá este sábado 17 de febrero a las 10 de la mañana de las instalaciones del Museo Tamayo a las del Museo Nacional de Antropología y están invitados a participar todos los miembros de la ciudadanía. El día de ayer, 15 de febrero, personalidades de sectores científicos, artísticos y culturales organizaron una conferencia de prensa en las instalaciones del Museo Tamayo para hacer un llamado a la gente a que forme parte de este ritual, así como explicaron cuál es la situación en que se encuentra la vaquita marina y en qué va a consistir la procesión.
La vaquita marina
El Dr. Carlos Galindo Leal, uno de los seis expositores que participaron en la conferencia de prensa, fue el encargado de hablar a detalle del mamífero en cuestión. Explicó que la vaquita marina vive en un área muy pequeña del Golfo de California, que tiene una extensión equivalente al estado de Tlaxcala. También precisó las razones por las que se encuentra en peligro son todas culpa del hombre: sobreexplotación de pesca, pesca ilegal, destrucción de su hábitat, contaminación, introducción de especies exóticas y cambio climático.
Además precisó que todos los consumidores tenemos un impacto directo en su hábitat y que una manera en que podemos apoyar en las labores de conservación de las especies es teniendo hábitos de consumo que sean sustentables. Otro de los expositores profundizó en el tema, el Dr. Rodrigo Medellín, quien además de mencionar que si no se toman las acciones necesarias lo necesario para evitar la extinción de esta criatura, desaparecerá en unos tres años, habló de cosas específicas que puede hacer la gente para proteger a las plantas y animales mexicanos.
La primera es siempre preguntar de dónde vienen los alimentos que comemos y siempre tratar de consumir productos mexicanos. Después mencionó que reduzcamos nuestro consumo de productos que no son sustentables, como la carne o algunos tipos de pescado de gran tamaño. También puso al camarón como ejemplo, pues por cada kilogramo de camarón que se pesca, se extraen otros 40 kilos de otras especies que mueren en las redes y sus cadáveres son regresados al mar. También acciones tan simples como reducir nuestro tiempo de baño o separar la basura son acciones eficaces para proteger al medio ambiente. Hizo un llamado a la gente a que haga cambios pequeños que vayan aumentando poco a poco y fue muy claro en señalar que esto es responsabilidad de todos.
Naturaleza y cultura
Mónica del Villar, directora de proyectos especiales de Artes de México, explicó que la procesión recorrerá la distancia entre estos dos museos para representar la unión entre naturaleza y cultura, simbolizada en tres espacios: bosque de Chapultepec (naturaleza), Museo Rufino Tamayo (arte contemporáneo) y Museo Nacional de Antropología (historia de México). Resaltó la importancia que tiene el arte para influir en cambios sociales, particularmente para difundir las ideas de sustentabilidad. Y mencionó que además de la procesión, Robles Gil cargará una escultura llamada Memorial marsopa vaquita, que quedará expuesta en el vestíbulo del MNA, así como se formará una cadena humana para transportar un cráneo real de vaquita marina al mismo recinto.
Acercarnos a la naturaleza
El resto de los expositores fueron Dolores Beistegui, directora del Papalote Museo del Niño; Vance Martin, presidente de The Wild Foundation, que lucha por la conservación de especies en todo el mundo; e Iván Carrillo, periodista de la ciencia; y hablaron de la importancia del proyecto desde sus respectivas trincheras. Dolores Beistegui habló de lo difícil que es que la gente se involucre con causas como esta si no tienen cercanía con la naturaleza, algo que tristemente sucede mucho en metrópolis tan grandes como la Ciudad de México, por ello en el Papalote Museo del Niño se ha buscado lograr que los niños entren en contacto con el mundo natural y se ha encargado de que vayan muchos a la procesión del sábado.
Por su parte, Vance Martin, que tiene experiencia trabajando con organizaciones de conservación en todo el mundo mencionó que la vaquita marina representa una llamada de atención a la crisis de extinción que está sucediendo por todas partes, así como de la falta de relación que tenemos los seres humanos con la naturaleza.
La Procesión en Honor a la Vaquita Marina se llevará a cabo este sábado a las 10 de la mañana, partirá del Museo Rufino Tamayo al Museo Nacional de Antropología. Participen y demostrémosle al mundo que los mexicanos luchamos para defender a las especies que habitan en nuestro país, uno de los más diversos en el mundo. Perder a la vaquita marina sería una tragedia, salvarla sería una historia de éxito que valdría la pena celebrar y un primer paso hacia una verdadera conexión entre los mexicanos y la naturaleza.
Para más información visiten procesionvaquita.org.