La forma del agua, el largometraje más reciente de Guillermo del Toro, hizo al tapatío merecedor del premio al mejor director en la 75ª edición de los Premios Globo de Oro, entregados por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood.
Del Toro es el tercer realizador mexicano en ganarlo, tras las victorias de sus amigos Alfonso Cuarón (Gravedad) y Alejandro González Iñárritu (El renacido) en años recientes. Ambos se llevaron el Óscar al mejor director unos meses después del Globo de Oro, por lo que las probabilidades de que “el Gordo” sea el tercer mexicano en ganar la estatuilla dorada son altas.
Cuando subió al escenario para aceptar el galardón, Del Toro agradeció, conmovido, a los monstruos, quienes, dijo, “son los santos patronos de nuestra imperfección maravillosa”, al elenco de La forma del agua y al equipo de producción de la película, quienes lo veían desde su mesa con lágrimas en los ojos. El mexicano agradeció especialmente a las mujeres que hicieron posible que recibiera el Globo, entre ellas Vanesa Taylor (con quien escribió el guión), Sally Hawkins (protagonista de la película) y Octavia Spencer (actriz secundaria), algo destacable dado el clima social en Hollywood, donde figuras masculinas importantes han sido señaladas por utilizar sus puestos de poder para ocultar prácticas de acoso y abuso sexual.
Cuando la música que marcaba su salida empezó a sonar, el tapatío pidió entre risas que la quitaran, pues le había tomado 25 años llegar a ese escenario. Al salir, respondió preguntas de reporteros de alrededor del mundo, donde sacó a relucir el carisma y sentido del humor que lo han vuelto tan querido por el público mexicano.
Cuando se le preguntó cómo hace para contar historias tenebrosas, siendo él una persona tan alegre, Del Toro contestó diciendo: “Soy mexicano. Nadie ama la vida más que nosotros, porque, de alguna manera, tenemos a la muerte muy presente”.
También habló de la forma en que escribe personajes femeninos, pues su filmografía está llena de mujeres fuertes que no necesariamente terminan en una relación romántica con otro personaje, un cliché hollywoodense. “Te acercas a cada personaje con una interés diferente. […] Me encanta escribir estos personajes y cada uno te dice qué necesita. Y si necesitan una historia de amor, entonces por Dios les escribes una gran historia de amor. Pero incluso en esos casos, incluso cuando escribes una historia de amor, puedes hacerlo intentando conscientemente no contar la historia de amor errónea. […] No creo que el amor se trate de cambiar a la persona, sino de entender a la persona, así que incluso en esos casos no tienes que hacer la típica historia de amor”.
La forma del agua es, según su director, un cuento de hadas para adultos, una historia de amor entre una mujer muda y una criatura acuática encerrada en un edificio del gobierno estadounidense. La película ya ganó el León de Oro en el Festival de Cine de Venecia; fue la más nominada en los Globos de Oro con siete nominaciones, de las que ganó el premio a Mejor director y a la Mejor banda sonora; y suena fuerte para los Óscares. Se estrenará en nuestro país el 12 de enero y nosotros ya no podemos esperar para verla en la pantalla grande.
¡Felicidades, Guillermo!
Foto principal: EFE