Eran otros tiempos. La televisión se veía en blanco y negro. En los hogares había máximo un televisor (una caja enorme) y la familia entera se reunía en la sala para ver los programas. Lejos de las fórmulas simples y baratas que se utilizan hoy en día, o de series importadas, había contenidos mexicanos de mucha calidad, sobre todo en el género de la comedia. Los comediantes habían saltado de la carpa al cine y hacia finales de los sesenta y principios de los setenta a la televisión. Tal es el caso de Los Polivoces y de El show de los Polivoces, estelarizado por Enrique Cuenca y Eduardo Manzano. A continuación algunas de las joyas que podían verse en pantalla.
Cruz, cruz, vete, malvado, que se vaya el diablo y que venga el Niño Jesús. Que todas las plagas y los jinetes del Apocalipsis te caigan sentado en tu pescuezo, malvado.
Eduardo Manzano como «El Wash and Wear».
¡Ahí, madre!
Eduardo Manzano como «Gordolfo Gelatino».
–¡Hijazo de mi vidaza!
–¡Ahí!
–¡Cañangas ñangas! Ah, despachándose con la cucharota grandota, ¿verdad?
–¡Mironas! Luego se te amontonan, hijo.
– Déjalas, es que no puedes prohibirles que se engolosinen, madre. Lo mejor de la vida es gratis.
–Ya lo quisieran para un día de fiesta. ¡Y yo lo hice solita! Cosecha 1940. Lo mejor del siglo, según los conocedores.
– Madre, me estás quemando….
Enrique Cuenca como «Doña Naborita» y Eduardo Manzano como «Gordolfo Gelatino».
– ¿Se puede saber qué demonios estás planchando, Andobas? ¿Y en esa llanta?
– Son sus pantalones, Don Teofilito. Traté de plancharlos con el burro pero no se podía.
– Con el burro vas y le planchas las arrugas a tu abuela, la que está disecada ahí en Guanajuato.
–Da coraje, Don Teofilito, da coraje. ¿Ya vamos a empezar a ofendernos?.
Eduardo Manzano como «Don Teofilito» y Enrique Cuenca como «Andobas».
– Quiubo, Chano.
– Quiubo, Chon.
– Oye, qué altote se ve ese cerrote, ¿verdad, tú?
– Es rete alto y rete peligroso.
–¿Por qué, tú?
– Hace quince días subieron unos turistas ahí y ya nunca regresaron.
–¿Se murieron?
– No, bajaron por el otro lado.
Los Polivoces como «Chano y Chon”.
Chao, mi cabecita de algodón, be careful con esos frenos, madre, no lo olvides. Cómo se me antoja ayudarla, lástima que… esta cochina flojera no deja. Pero a ella le gusto así y ella es la que manda.
Eduardo Manzano como «Gordolfo Gelatino».
– Crucé un gorila con un mesero.
– ¿Y qué esperas que salga de ahí?
– Pues no sé, pero lo que salga, van a tener que darle muy buenas propinas.
Los Polivoces como «Los Hermanos Lelos”.